
Cincuenta y seis de los casi cien vehículos lujosos ingresados al país con licencia diplomática, en el marco de la causa en la que se investiga si se cometió delito de "contrabando", quedaron impedidos de circular por orden del juez en lo penal económico Marcelo Aguinsky.
El magistrado, además, emplazó a los titulares argentinos a presentarse en el registro de la propiedad automotor para endosar el seguro de cada vehículo a nombre del juzgado y realizar otros trámites de verificación de los trámites anteriores.
Aguinsky investiga el caso como contrabando agravado a raíz de un pedido de la Aduana. Su colega Norberto Oyarbide, en tanto, lo hace en virtud de la denuncia penal de Cancillería.
Justamente Oyarbide decidió ayer solicitar informes con carácter de urgente sobre las identidades, condiciones y situación laboral de unos 15 actuales y ex embajadores. También de decenas de cónsules y consejeros.
Con ello busca determinar ahora si los funcionarios extranjeros cometieron "delitos de acción pública" en torno a la importación de autos con franquicia diplomática que investiga.
El escándalo estalló el lunes cuando la Cancillería presentó una denuncia penal a raíz de una auditoría que detectó irregularidades en el "circuito de ingreso, circulación y nacionalización" de automotores ingresados al país con el beneficio de la exención impositiva de la que gozan las misiones y las representaciones extranjeras, sus funcionarios y empleados entre 2004 y 2007.
Concretamente, las irregularidades se refieren al momento en que se realizaron las nacionalizaciones de dichos vehículos, que deberían haberse realizado sólo bajo el "cese de funciones" del diplomático beneficiario y bajo ciertas normativas que parecen no haberse cumplido en numerosos casos. De hecho, el canciller Jorge Taiana decidió también apartar del cargo al funcionario que estaba al frente del Area de Franquicias, Jorge Matas.