
Los productores agropecuarios entraron hoy a la segunda jornada del paro que mantendrán hasta el miércoles, el cuarto desde que se inició a comienzos de marzo la disputa por el esquema de retenciones móviles. A pesar de que en las últimas horas se registraron menos cortes de ruta, ya que los transportistas aligeraron su protesta por el conflicto, todavía se perciben signos de desabastecimiento, sobre todo en el interior del país.
Este segundo día en la medida de fuerza del campo trae otro dato de peso para evaluar el impacto del conflicto en la economía: el turismo en el fin de semana largo que culmina hoy cayó un 50 por ciento en relación al mismo mes del año pasado.
Mientras tanto, productores agropecuarios y camioneros mantienen bloqueos de rutas en unos 30 puntos del país, donde se impide el paso a los camiones con cereal para exportación. Ayer hubo cuatro cortes totales y 25 bloqueos parciales en distintas rutas.
El nuevo paro se decidió anteayer tras la detención de 19 productores agropecuarios en la ciudad de Gualeguaychú, incluido el titular de la Federación Agraria de Entre Ríos, Alfredo De Angeli.
La convulsionada situación está generando problemas de abastecimiento fundamentalmente en las ciudades del interior del país. Combustibles y algunos alimentos son los principales afectados.
El presidente de la Federación Panaderil de la provincia de Buenos Aires, Emilio Majori, sostuvo por ejemplo que en su sector se sienten "impotentes". Y lanzó: "El viernes anunciamos que teníamos harina por 48 horas. A partir de mañana ya no tenemos más". La escasez ya se hace sentir incluso en Capital Federal y el Gran Buenos Aires en materia de combustibles. En algunas estaciones porteñas no cuentan con gasoil y sólo venden nafta Premium o no se carga con tarjeta de crédito.