Hay trabajito fino en Venezuela parece para buscar la salida del actual gobireno

Diosdado Cabello renovó su mandato a cargo de la presidencia de la Asamblea Nacional de Venezuela y sigue siendo la persona que debería tomar el poder en caso de la ausencia de Hugo Chávez en la asunción del 10 de enero, según lo afirmado por la Constitución. La sesión para elegir al presidente del Parlamento venezolano para el próximo año se realizó en presencia del vicepresidente Nicolás Maduro y varios ministros. La elección se da en momentos de gran incertidumbre en Venezuela debido a la gravedad del estado de salud del presidente Hugo Chávez, hospitalizado en Cuba desde el 11 de diciembre. “La Asamblea Nacional elegirá de su seno un Presidente o Presidenta y dos Vicepresidentes o Vicepresidentas, un Secretario o Secretaria y un Subsecretario o Subsecretaria fuera de su seno, por un período de un año. El reglamento establecerá las formas de suplir las faltas temporales y absolutas”, dice el artículo 194 de la Constitución. La designación es determinante, ya que probablemente Hugo Chávez no pueda presentarse ante la Asamblea el 10 de enero para asumir la presidencia, lo que dejaría al titular de la cámara como el presidente en ejercicio, mientras se realiza un nuevo proceso eleccionario. “A la seriedad normal que debe tener el presidente del Parlamento se ha agregado la circunstancia adicional que esa persona puede ser el encargado de la presidencia de la República por un tiempo”, aseguró Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la opositora Mesa de Unidad Democrática. Pero el oficialismo tiene una interpretación distinta del texto constitucional. Nicolás Maduro, vicepresidente de la Nación, afirmó en estos días que la jura ante la Asamblea es una mera formalidad, y que Chávez podría jurar más tarde ante el Tribunal Supremo de Justicia. En ese caso no sería necesario llamar a elecciones y Maduro quedaría como presidente provisional hasta que Chávez esté en condiciones de retomar el mando.

MAR DEL PLATA: Gran expectativa por el arribo de la Fragata Libertad

Amarrará el próximo miércoles en la Base Naval de Mar del Plata. Ha captado el interés de miles de turistas que desean ver de cerca la embarcación luego que permaneciera retenida en Ghana. Turistas que pasan sus días de descanso en la ciudad, contaron a Télam sus impresiones a escasos días del arribo de la Fragata, que será recibida con una fiesta náutica y una celebración popular y múltiples presentaciones artísticas. Al respecto Tomás Cirino, oriundo de Rosario dijo: “Teníamos pensado con la familia ir a vacacionar a Pinamar, pero sabiendo que la fragata llegaba a Mar del Plata decidimos cambiar el rumbo y ya estamos instalados en esta hermosa ciudad para recibirla”. “Será un verdadero show donde no sólo veremos al emblema nacional en aguas argentinas, sino que esta estará acompañada y escoltada por embarcaciones de clubes náuticos, banderas celestes y blancas y música de nuestra tierra” explicó Tomás. Por su parte, María Marta de Junín, quien se encuentra de vacaciones con su esposo y dos hijos, relató: “queremos que nuestros hijos sientan el espíritu patriótico de lo que significa la Fragata para nosotros”. “Ya tenemos pensado llegarnos hasta la altura de Parque Camet para ver su entrada a la ciudad en medio de un clima de fiesta y alegría”, sostuvo. Horacio, que visita Mar del Plata desde la provincia de Chaco, dijo haberse enterado por los diarios de todos los preparativos previstos para la llegada de la Fragata, y por eso con su esposa van “a ponerse la camiseta Argentina para verla llegar”. Amalia Moretti, de la localidad de Bolívar, mientras pasea con su esposo y su caniche por el Boulevard Marítimo, dijo: “la llegada de la Fragata nos ha emocionado a todos los argentinos. Gracias a Dios estoy en Mar del Plata para poder verla de cerca, así que el próximo miércoles me instalo en la escollera norte desde temprano para ver el show programado para su recibimiento”. Por su parte, docentes de distintas colonias de vacaciones aprovecharán este acontecimiento para acercar a los niños que concurren a la orilla del mar, en la zona de Playa Grande, para que vean el arribo del buque escuela de la Armada Argentina.