Bajaron los precios y en julio hubo una inflación de 0,4% según el INDEC

Otra vez, el INDEC difundió una cifra de inflación alejada de las estimaciones privadas y de la percepción social, en medio de renovadas críticas y protestas de un sector de los empleados del organismo. Según el cuestionado Indice de Precios al Consumidor (IPC), en julio la inflación fue de apenas 0,4 por ciento. Esa cifra representa prácticamente un tercio de lo que los privados calcularon para el séptimo mes del año. Por debajo del promedio de 0,4 por ciento, en el relevamiento del INDEC, se ubicaron los rubros Educación, con un alza de 0,3 por ciento, y el de Alimentos, que presentó una baja de junio a julio del 0,8 por ciento. Así, según el INDEC, el acumulado en lo que va del año para el INDEC es de 5 por ciento. Y la suba de precios con relación al mismo mes del año pasado es de 9,1 por ciento. Las cifras se dieron a conocer apenas unas horas después de una nueva protesta de trabajadores del INDEC enrolados en ATE, que denuncian desde hace meses la manipulación de las estadísticas oficiales por la intervención operada por el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno. Las críticas a las mediciones, fundamentalmente al IPC, rebasaron de hecho el conflicto sindical puertas adentro. En los últimos días, desde la Unión de Industriales Argentinos (UIA) se pidió en público un sinceramiento de los datos de inflación. Por ahora, los cuestionamientos no alcanzan para torcer el rumbo del Gobierno en la materia. Durante su primera conferencia de prensa como Presidenta, Cristina Kirchner respaldó a Moreno en su cargo y en el Ministerio de Economía creen que las opiniones de los privados son exageradas. De hecho, en los primeros borradores del Presupuesto 2009, ya se planea repetir la misma pauta de inflación que se puso para 2008: un rango de entre 7% y 9% en el año. El argumento en el equipo del ministro Carlos Fernández es que se moderaron dos de los factores centrales que explicaron la aceleración de los precios en la primera mitad del año: la suba en los precios internacionales de las materias primas y el conflicto con el campo, que produjo una retracción de la oferta.