Mientras Israel sigue con los ataques aéreos sobre Gaza no descarta una incursión terrestre

La violencia no cesa. Aviones israelíes lanzan desde esta mañana nuevos ataques devastadores en Gaza y bombardearon uno de los principales complejos de seguridad de Hamas en Ciudad de Gaza, que incluye una prisión. Por otra parte, el gabinete israelí autorizó el llamado a por lo menos 6.500 reservistas del Ejército, lo que indicaría que busca ampliar la ofensiva con un ataque por tierra. Sobre el ataque de hoy, varios testigos indicaron que los aviones israelíes lanzaron tres bombas sobre el complejo de Seraya, en el centro de Gaza. Allí, los rescatistas realizan tareas de remoción en búsqueda de heridos y víctimas fatales. Funcionarios del Ministerio de Salud de Gaza dijeron que cuatro personas murieron y 25 fueron heridas en este nuevo ataque. Los bombardeos de ayer sobre la Franja, en tanto, ya dejaron más de 270 víctimas mortales y casi un millar de heridos. Otras incursiones de la aviación israelí destruyeron hoy un camión de combustible y un depósito donde se almacenaban medicinas. Mientras tanto, en las últimas horas, unidades blindadas y de infantería enfilaban hacia la frontera con Gaza para una posible invasión por tierra. En respuesta, milicianos de Hamas y de otras organizaciones armadas palestinas dispararon decenas de cohetes y proyectiles de mortero contra comunidades fronterizas. Dos cohetes llegaron cerca de Ashdod, la ciudad más grande del sur de Israel, situada a unos 38 kilómetros de Gaza. Se trata de la mayor penetración de misiles palestinos en territorio israelí que se recuerde. Este ataque confirmó los temores del gobierno de Jerusalén de que los milicianos pueden hacer llegar sus cohetes a las principales ciudades israelíes. No obstante, hasta el momento no hay reportes de muertos ni de heridos graves. Hoy, las calles de Gaza lucen vacías. La mayoría de sus residentes se quedaron en sus casas por el temor a nuevos ataques aéreos. El ataque israelí, sin precedentes, desató protestas y llamados en todo el mundo al cese de la violencia en la región.