La Fundación Alameda denunció a tres empresas del cordón frutihortícola. Con una cámara oculta detectaron niños en las cosechas y situaciones de esclavitud y condiciones de hacinamiento.
Se llevó a cabo este lunes una serie de allanamientos judiciales con efectivos de Gendarmería Nacional producto de una denuncia por explotación infantil y esclava en tres fincas ubicadas en Batán, en las afueras de la ciudad de Mar del Plata.
El resultado de estos operativos surgió luego de una investigación de varios meses de la Fundación Alameda, que presentó el pasado 18 de enero una denuncia ante la Fiscalía General que consta de cámaras ocultas y testimonios con identidad reservada.
Con la colaboración de Madres de Plaza de Mayo e Hijos de Mar del Plata, lograron infiltrarse en campos ubicados dentro del cordón frutihortícola y descubrir que la incorporación de personal de nacionalidad boliviana no se hace espontáneamente, sino mediante reclutadores o conocidos directos y la protección policial con que cuentan estas empresas, ya que ante la menor sospecha de personas ajenas al lugar merodeando, arriba la Policía para pedir documentos y tratar de averiguar las razones de la visita.
Después de infructuosos intentos de ingresar a las fincas, donde no pasan siquiera docentes ni médicos de la zona, se pudo hacerlo disfrazado de Reyes Magos. La excusa fue que eran de un grupo de voluntarios que acercaba juguetes para los niños en ocasión del día de reyes. En la seccional policial se consultó dónde se encontraban los chicos y estos mismos efectivos orientaron a los “voluntarios” hacia las fincas con explotación infantil.
En el material fílmico que se entregó a la justicia se demuestra que es habitual el trabajo de menores de 6 a 11 años en las cosechas de morrón, tomate y frutilla. Todos los chicos con los que se habló reconocen que trabajan.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario