MAR DEL PLATA: Buenos Aires Unidos y Quilmes se quedarán sin estadio?

Vecinos se muestran molesto por el impacto negativo que genera el entorno de esos espectáculos en un escenario enclavado en un barrio residencial. Quejas al municipio y la policía por falta de control. El estadio del club Once Unidos se ha erigido en el último tiempo en epicentro de grandes acontecimientos deportivos, políticos y artísticos que provocó una transformación en el residencial barrio Parque Luro. Ubicado en Falkner y Belisario Roldán, la entidad mostró un crecimiento estructural significativo que se vio ratificado por un subsidio que el gobierno bonaerense le entregó este año para construir un nuevo gimnasio y mejorar las condiciones de su predio. Hasta no hace mucho, ese estadio albergaba particularmente los partidos de Quilmes en los certámenes nacionales de básquet (LNB y TNA) y en la previa y luego de cada partido provocaba trastornos a los vecinos que conviven en el barrio con el club Once Unidos. Pero en el último tiempo, la sucesión de eventos masivos se han multiplicado, incluyendo veladas internacionales de boxeo, actos políticos y la presentación del equipo de voley que interviene en la Liga Argentina. Mientras que en el horizonte aparece el Preolimpico de basquet y el Mundial Juvenil de Handball. Ante este panorama, los vecinos decidieron elevar un reclamo por las consecuencias negativas que trae al barrio este panorama. En declaraciones, Gabriel, un frentista que vive a pocos metros del club, graficó lo que deben padecer cada noche que se desarrolla un evento que moviliza a cientos de personas. Tras remarcar que la sociedad de fomento está al tanto de la situación, comentó que “es un problema que cada día se agrava más, pagamos impuestos muy altos y vemos como nuestra calidad de vida se va deteriorando”. El vecino aclaró que no están en contra de la actividad social y deportiva que el club realiza, sino que el tema que les preocupa es la proliferación de mega eventos que trae aparejado una serie de situaciones que atentan contra el barrio y la falta de controles del municipio y la escasa presencia policial. En tal sentido, especificó que “charlamos con el gerente del club, Horacio Taccone, y en principio no da ninguna solución al tema porque principalmente afecta sus intereses comerciales”. “Cada noche que se realizan estos eventos genera ruidos molestos a altas horas de la madrugada, se instalan puestos de venta de comida sin ningún control bromatológico, utilzan las casas como baños, irrupción de cuidacoches que invaden los accesos de las viviendas y cuando llamás a Tránsito para que retiren un auto o un colectivo no recibís respuesta y además se registran episodios de inseguridad”, detalló.