Tras una hora de deliberación, los representantes de los diez países de Unasur, reunidos en Guayaquil, presentaron un pronunciamiento del bloque en el que se respaldó al gobierno de Rafael Correa, tal como se esperaba.
El venezolano, Alí Rodriguez, secretario general del organismo, leyó el comunicado de siete puntos en el que condenaron el eventual asalto de la embajada ecuatoriana en Londres por parte de la policía y defendieron la figura del asilado político.
Tras solidarizarse con el gobierno ecuatoriano, destacaron el “derecho soberano de los Estados para conceder asilo”. “Reiteramos la vigencia de la institucionalidad de la figura del asilo y el refugio para proteger los derechos humanos de personas que se sienten amenazadas”, señala el texto.
Los cancilleres, además, insistieron en que las sedes diplomáticas son inviolables e instaron a Reino Unido a respetar el derecho internacional en virtud del cual no se puede invocar el derecho interno para no cumplir con obligaciones internacionales.
Exhortaron a "las partes a continuar el diálogo en procura de una solución mutuamente aceptable", de acuerdo con la declaración conjunta.
En la cita estuvieron presentes los cancilleres de Ecuador, Ricardo Patiño; Venezuela, Nicolás Maduro; Colombia, María Ángela Holguín; Uruguay, Luis Almagro; Perú, Rafael Rocagliolo; y Argentina, Héctor Timerman.
El sábado, los integrantes de Alba advirtieron que un eventual ingreso de la policía británica a la embajada de Ecuador en Londres para arrestar a Assange tendría "graves consecuencias en el mundo".
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