La tragedia del Turismo Carretera desencadenó una serie de reclamos y críticas contra las autoridades del automovilismo nacional, algunas de las cuales fueron desmitificadas por el médico de la Asociación Corredores de Turismo Carretera (ACTC), Rodolfo Balinotti, en un extenso diálogo.
“Es un accidente de autos en un circuito de los más respetados por los pilotos junto al de San Juan, porque tiene lugares complicados donde hay que tomar más precauciones que en otros circuitos y donde las vías de escape son más acotadas”, comenzó el facultativo, y ejemplificó: “No es lo mismo correr en Mónaco que en Monza; en Mónaco hay que tener mayor precaución porque te vas de la pista y golpeás muy fuerte. Ayer tuvimos la desgracia en un lugar donde después de 600 o 700 pasadas durante todo el fin de semana no se había ido ninguno (afuera)”.
Balinotti explicó que tanto Guido Falaschi como Mauro Giallombardo se encontraron a la salida del puente del circuito de Balcarce con un auto que venía rezagado (el de Larrauri) y, para no golpear a su rival, Falaschi realizó una maniobra brusca que lo despistó y produjo el desenlace fatal.
“De los autos que vienen atrás ninguno choca por esquivar gomas, sino porque se encuentran con el auto de Larrauri con la cola sobre el piano. Ortelli esquiva y se va a donde está Falaschi, con tanta mala suerte que le pega y lo manda a la pista. Ahí queda en una condición desprotegida, porque es el auto, con ese peso y las cuatro ruedas plantado sobre el piso. El auto de Girolami y se lo encuentra en el medio”, manifestó al ser consultado por la maniobra.
En ese sentido, detalló: “Cuando dos autos se golpean y están en movimiento, la energía que soporta el piloto es mucho menor que cuando un auto ya está parado. Todos están diciendo que le pega en la puerta y lo lastima. En realidad le pega en el parante lateral de la parte del acompañante, más tirando hacia el eje, que tiene una rigidez tal que toda la energía se la come el piloto”.
El facultativo aseveró que “nada lo lastima a Falaschi; esto no es un accidente de un auto común, donde todas las partes del auto están arriba del que maneja. Guido está limpio de todo esto, pero el impacto le genera una fractura en la base del cráneo que le hace perder sangre, entra en shock y en paro, y que se hace imposible revertirlo por la magnitud de la fractura”.
Balinotti confirmó que el piloto santafesino, de 22 años, “muere del impacto del de Girolami; ninguno de los otros impactos le hace nada”, ratificó que “no tenía ninguna lesión cervical” y comentó que cuando se acercaron a auxiliarlo, la víctima fatal “le dijo a uno de los pilotos (NdeR: Juan Manuel Silva) que tenía mucho calor. Balbuceaba. Ya con nosotros no lo hizo”.
“Es un accidente que pasa en cualquier parte del mundo, típico de las carreras donde después de pasar bajo un puente los pilotos se encuentra con un panorama que es muy difícil de resolver. Tenemos que hacer autocritica todos”, pidió.
También se refirió al caso de Falaschi: “A mi entender el casco de Guido tenía un medio punto más grande del que correspondía. A veces la comodidad a uno le permite no estar tan ajustado. Lo digo porque se lo pude sacar muy fácilmente; lo tenía ligeramente hacia arriba, y ese borde, en el movimiento lateral, le pudo haber impactado debajo del oído y fracturado el hueso que está ahí”.
La salud de Girolami
“Lo estamos tomografiando de nuevo como precaución, porque tiene un traumatismo abdominal, de pelvis, y tenemos que ver si hay rupturas de segunda. Estamos tranquilos, está bien. Está muy dolorido pero sin ningún tipo de lesión. Todavía no sabe de la muerte de su amigo y estamos trabajando con el equipo de psicólogos. Vamos a esperar a que salga de terapia intensiva”.
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